“La información jurídica es completamente diferente al resto, que vienen de la vida misma”. Así comenzó su exposición Rafael Guerra, durante el Curso de Actualidad Urgente de Lenguaje Jurídico para Periodistas, organizado este jueves por la Asociación de la Prensa de Valladolid en colaboración con el Colegio de Abogados de Valladolid.
“Cuando uno acude a un juicio, tiene algo especial. La dificultad está en el léxico, que es lo más característico”, comentó. “El derecho cuenta con un léxico específico heredado del latín, incluso con frases hechas”, analizó Guerra. Aquello que se llama tecnolectos.
El abogado indicó que una de las principales características del lenguaje jurídico es la gran extensión de sus párrafos, algo inaceptable para otro tipo de géneros y de informaciones, donde lo que prima son las frases cortas y sencillas. “Se utilizan párrafos con una prosa muy amplia, aunque hoy en día se tiene a menos porque los jueces pasan por un proceso de adaptación al aspecto de la redacción”, justificó. “Las sentencias son algo más ligeras”.
Rafael Guerra continuó su charla recordando que los juristas han optado por esta forma de escribir “desde siempre”, “los párrafos largos son así por tradición” y que actualmente se han ido adaptando nuevas fórmulas conceptuales como “copiar la estructura de sentencias”, algo que en muchas ocasiones es debido “a la gran cantidad de trabajo que tienen los magistrados”. Esta fórmula se impuso “para ahorrar tiempo y reducir las horas de estudio, no para equivocarse”, comentó Guerra.
El aspecto más negativo según el ponente sobre el lenguaje jurídico es que “las ideas se repiten” y pueden “llegar a crear confusión en el lector”. Por ello, está de acuerdo con que los periodistas no utilicen tantos conceptos jurídicos a la hora de explicar una noticia sobre tribunales, ya que “cuantos más términos emplee, más probabilidad de equivocarse”.
A lo largo de la hora y media que duró el curso, Rafael Guerra hizo un breve repaso de los términos más comunes y básicos sobre el lenguaje jurídico que se manejan habitualmente, como acciones, legitimaciones, procedimientos, juicio de faltas, denunciante, querellante, imputado, acusado, providencia, auto, sentencia, sumario, pieza y muchos otros, que los periodistas deben saber distinguir para evitar cometer errores importantes.
Texto: Pedro Alonso.